martes, 20 de septiembre de 2016

EN LA SERRANÍA DE RONDA

LA TEMPORADA DE CASTAÑA EN ANDALUCÍA
COMIENZA EN EL VALLE DEL GENAL

COAG Andalucía pide la suelta de torymus para la avispilla y buscar soluciones a las enfermedades de la tinta y el chancro.

Sevilla, 20 de septiembre de 2016. La temporada de castaña comienza en Andalucía con la apertura de las puertas de la cooperativa de 2º grado Castañas Valle del Genal y su cooperativa asociada de Jubrique (Málaga), para recoger de sus socios las castañas extratempranas de la variedad agosteña o portuguesa. En los próximos días se espera comenzar con la recolección de las variedades tempranas autóctonas, para continuar a primeros de octubre con la principal variedad que se cultiva en el Valle del Genal, la Pilonga. La cosecha durará hasta la primera semana de noviembre, terminando con las variedades tardías, entre las que destaca la Tomasa, si bien la cooperativa seguirá elaborando las castañas hasta finales de mes.

Este año la pluviometría no fue muy generosa y las altas temperaturas que alcanzaron los 42º en la primera semana de septiembre, han provocado cierta merma de la producción. No obstante, se espera una cosecha media, en torno a los 3 o 3,5 millones de kilos, incluyendo la producción del Valle del Genal, en la Serranía de Ronda, y de Yunquera, en la Sierra de las Nieves. En la Sierra de Aracena, la otra gran zona productora, la campaña comenzará ya en el mes de octubre, e igualmente se espera una cosecha media, aunque la producción final dependerá de las lluvias que puedan producirse en las próximas semanas.

COAG Andalucía recuerda que la castaña es el principal recurso económico con que cuentan los pueblos que conforman estas comarcas y el que fija población al territorio. En el Valle del Genal, sólo en la recogida, que es absolutamente manual, se crean unos 30.000 jornales, entre mano de obra familiar y jornaleros venidos de las comarcas próximas.

El responsable de castaña de COAG Andalucía, Francisco Boza, ha explicado que “si bien el precio, en los últimos años está compensando el arduo esfuerzo que significa el cultivo de la castaña, el sector vive pendiente de dos amenazas que preocupan notablemente a los productores: la avispilla del castaño y las enfermedades de la tinta (en Málaga) y del chancro (en Huelva)”.  

La más preocupante, por su incidencia inmediata, es la temida avispilla del castaño, plaga causada por un pequeño insecto de  origen chino que va a mermar la producción de castaña en los próximos años. El único medio para combatirla es la suelta masiva de su predador natural, el Torymus sinensis, medida que se viene reclamando al Ministerio de Agricultura desde que se detectó por primera vez en Málaga en el año 2014.

En cuanto a la tinta o seca del castaño, es una enfermedad producida por el hongo Phytophtora Cinnamomi, que causa la muerte súbita del árbol. Van apareciendo con mayor frecuencia focos cada vez más extensos por todo el Valle del Genal. Respecto al chancro, también está producido por un hongo, el Cryphonectria parasítica, que seca brotes y ramas, pudiendo igualmente provocar la muerte del árbol. El sector reclama de la Administración que se busquen las soluciones pertinentes a estas dos enfermedades.