miércoles, 29 de marzo de 2017

Aprueba también una renovación de la junta directiva y el máximo responsable de la entidad reclama a las administraciones un compromiso “serio y suficiente” con el sector agrario

Aprueba también una renovación de la junta directiva y el máximo responsable de la entidad reclama a las administraciones un compromiso “serio y suficiente” con el sector agrario

La asamblea de AVA-ASAJA reelige a Cristóbal Aguado presidente y acuerda una protesta contra Alcampo

Valencia, 29 de marzo de 2017. La asamblea general extraordinaria de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) reeligió esta tarde a Cristóbal Aguado, con el 98% de los votos a favor, presidente de la entidad para los próximos cuatro años y aprobó la candidatura presentada por el propio Aguado y que incluye siete nuevas incorporaciones en la junta directiva, lo que supone la renovación de casi la cuarta parte del citado órgano de gobierno.

Al mismo tiempo, la asamblea acordó ayer convocar de manera inminente una concentración a las puertas de un supermercado de la firma Alcampo para protestar así contra la política de precios que aplica en los cítricos la citada empresa de distribución. Concretamente, Alcampo está vendiendo estos días la malla de 5 kilos de naranjas a 1,99 euros (0,39 el kilo), lo que constituye una estrategia que atenta contra las normas más elementales de la ética comercial porque tales prácticas establecen una tendencia bajista de las cotizaciones en la cadena de valor que termina indefectiblemente por hundir los precios en el campo.

Con este acuerdo para iniciar movilizaciones, Aguado comienza hoy su sexto mandato consecutivo al frente de la organización agraria y tras completarse un proceso electoral que se ha prolongado durante los últimos meses a través de la celebración de 132 asambleas locales que sirvieron para designar a los casi trescientos compromisarios que han llenado el salón de actos durante la celebración de la referida asamblea.

Respecto a los cambios efectuados en la junta directiva, el presidente electo de AVA-ASAJA explicó que obedecen fundamentalmente a la voluntad de rejuvenecer la composición de las máximas instancias decisorias de la entidad, “sobre todo –tal como destacó Aguado– porque no podemos olvidar que uno de los grandes problemas de este sector es el elevado envejecimiento que presenta la población agraria y en medio de ese contexto entendemos que es básico aportar savia nueva y apostar por las nuevas generaciones para contribuir de este modo a asegurar el futuro del campo”.

Los siete nuevos miembros de la junta directiva son Alejandro Aparicio Colomer y Salvador Juan Segura, como responsables de los cultivos de naranjas y mandarinas, respectivamente; Luis Julián Pérez Lázaro, que ejercerá como responsable de la sectorial del olivo; Vicente Carmelo Burches, que se hará cargo de la sectorial del caqui; Mario Barrera Ballester, en calidad de responsable de frutos subtropicales; Antonio Miguel Álvaro Sebastián, que se ocupará del ganado ovino-caprino y Vicente Benavent Prats, que pasa a encargarse del ganado vacuno. Asimismo, y por lo que respecta a la composición del comité ejecutivo de AVA-ASAJA, Miguel Minguet Gimeno, que ejerce como responsable de las sectoriales del arroz y del cereal, desempeñará también las funciones de tesorero de la entidad.

Tras la aprobación por parte de los compromisarios de las cuentas, los presupuestos para el año en curso y el informe de gestión, el presidente electo realizó un pormenorizado análisis de la situación agropecuaria y estableció algunas de las cuestiones prioritarias que van a marcar la agenda de la organización en los próximos meses.
En el apartado correspondiente a la política agraria y respecto al problema más acuciante que tiene planteado el sector, es decir, la volatilidad de los precios, Cristóbal Aguado abogó por trabajar en el desarrollo de dos líneas fundamentales: la primera se basa en la necesidad de que la Unión Europea legisle una ley de mercado a nivel comunitario que frene los abusos sobre los productores, mientras que la segunda consiste en la instauración en España de un seguro de rentas o costes que sirva para atenuar el terrible impacto que causan las coyunturas de hundimiento de precios, un proyecto éste último que ya está siendo estudiado por el Ministerio de Agricultura, según anunció durante el acto de celebración del 40 aniversario de AVA-ASAJA la titular de dicho departamento, Isabel García Tejerina.

Además, el presidente de AVA-ASAJA reclamó al conjunto de las administraciones un compromiso “serio y suficiente en materias que son fundamentales para nuestra supervivencia y me estoy refiriendo, entre otros temas, a la puesta en marcha de un Plan Hidrológico que cuente con un amplio consenso; a la imprescindible reforma de las estructuras agrarias valencianas, a la apuesta decidida por la investigación porque los avances tecnológicos abren la puerta de la competitividad; a la lucha eficaz tanto contra la entrada de nuevas plagas como contra la lacra de los robos en el campo y, finalmente, a la negociación de una nueva PAC que acabe de una vez por todas con la discriminación permanente que sufre la agricultura mediterránea”.

La principal legitimación de la PAC es la garantía de una alimentación sana y segura a precios razonables

Conferencia ministerial “Construyendo la PAC del futuro” #PAC2020
Miguel Blanco: “La principal legitimación de la PAC es la garantía de una alimentación sana y segura a precios razonables”

  • Bajo el título “Agricultura con Agricultores. Una nueva PAC para fortalecer el modelo europeo”, el Secretario General de COAG ha expuesto los ejes básicos de la propuesta de esta organización para la Política Agraria Común post-2020.

Madrid, 28 de marzo de 2017. Durante su participación en la segunda jornada de la Conferencia ministerial “Construyendo la PAC del futuro”, el Secretario General de COAG, Miguel Blanco, ha expuesto las ejes básicos de la propuesta de esta organización de cara al debate de la PAC post 2020. Bajo el título, “Agricultura con Agricultores. Una nueva PAC para fortalecer el modelo europeo”, el máximo responsable de COAG ha subrayado que la nueva Política Agraria Común debe responder a las necesidades de los agricultores y ganaderos profesionales y a los intereses del conjunto de los ciudadanos de la UE, afrontando de forma decisiva retos como el cambio climático y la transformación digital del sector. “En los últimos años, la preocupación por la seguridad alimentaria mundial, en un entorno volátil, ha renovado la necesidad de consolidar el carácter estratégico de la agricultura y la alimentación. Este hecho nos ha reafirmado en nuestra misión como agricultores: producir alimentos sanos y seguros en cantidad suficiente para el conjunto de la sociedad.  Esta es la mayor legitimación de la actividad agraria y la PAC y el principal bien público que puede proporcionar”, ha argumentado Blanco.
Para dar respuesta a todo ello, desde COAG se considera imprescindible:

  1. Fortalecimiento del modelo social y profesional de agricultura. Presupuesto acorde con nuevos retos, cubriendo el hueco que puede dejar el Brexit.
El gran reto de la nueva PAC será la preservación y fortalecimiento del modelo social y profesional de agricultura mayoritario en Europa.  Para ello, la PAC deberá seguir siendo una política común, fuerte, estructurada en dos pilares y con una financiación adecuada.  El presupuesto para la PAC a partir de 2020 debe estar en consonancia con los nuevos objetivos, retos y exigencias y, por tanto, debe aumentarse, cubriendo, en su caso, el hueco que puede dejar el Brexit.

  1. Restablecimiento de la preferencia comunitaria: los acuerdos con terceros países deben respetar las normas que se exigen a las explotaciones de la UE.

La UE debe cambiar el rumbo de su política de desregulación de los mercados y liberalización comercial e instaurar mecanismos efectivos que estabilicen los mercados agrícolas y garanticen unos precios a los agricultores que cubran sus costes de producción y alcancen niveles remunerativos acordes a los elevados estándares de calidad, seguridad alimentaria y respeto al medio ambiente que le son exigidos por la aplicación de los reglamentos europeos. Este modelo europeo debe protegerse restableciendo, con nuevas orientaciones, el principio de Preferencia Comunitaria.
Como norma general, los acuerdos con terceros países deben respetar las normas que se exigen a las explotaciones de la UE en todos los ámbitos (ambientales, higiénico-sanitarios, productivos, laborales, comerciales o sociales). Ciertos acuerdos, como el TTIP y el CETA, al afectar a los marcos regulatorios sensibles (seguridad alimentaria, denominaciones de calidad, normas medio ambientales), suponen una grave amenaza para nuestro modelo europeo de agricultura, basado en la calidad, la sostenibilidad y la diversidad, por lo que se debe proceder a su inmediata paralización.

  1. El  futuro  de  los  agricultores  se  decide  en  los  mercados. La agricultura necesita el reequilibrio de la cadena de valor agroalimentaria.
Es indispensable poner en marcha mecanismos públicos de regulación al nivel europeo para evitar las prácticas abusivas y desleales. Debe haber una regulación obligatoria única para toda la UE, que prohíba determinadas prácticas abusivas (venta a pérdidas, subastas a ciegas, imposición de pagos atípicos…), que sirva de elemento común para todas las operaciones comerciales, y que garantice la igualdad de condiciones en Europa, aunque pueda dejar cierto margen a los Estados miembro para adaptarse a sus particularidades.
Por otro lado, se debe conseguir un equilibrio entre las normas de competencia, su aplicación por parte de las autoridades competentes y la regulación del sector agroalimentario, estableciendo la excepción o inaplicabilidad de dichas normas en los mercados agrarios por su especificidad, con suficiente seguridad jurídica y reglamentaria, por ejemplo en situaciones de puesta en común o comercialización conjunta o medidas para la reducción coyuntural de la oferta.

  1. Los  pagos  directos  de  la  PAC  deben  continuar  y  mejorar    
COAG apoya que las ayudas directas se concedan a los “agricultores activos”, mejorando la definición de la última Reforma  de la PAC.  Queremos que esta figura se fortalezca en la próxima reforma y se aplique de forma común en el conjunto de la UE.  Nuestra propuesta es que se considere agricultor activo al profesional que obtiene una parte significativa de sus ingresos totales de la actividad agraria (25%).  
De cara al futuro, y atendiendo a la defensa de un modelo social y profesional agrario mayoritario en Europa, COAG viene proponiendo un nuevo modelo de pagos directos vinculado a la actividad y en base al empleo generado en las explotaciones agrarias, con un techo máximo de ayudas por explotación.  Proponemos una auténtica modulación de las ayudas directas.
Por supuesto, el pilar del desarrollo rural debe mantenerse e incluir aquellas medidas que necesitan aplicarse a nivel territorial y en un marco plurianual.  La nueva PAC deberá mejorar la sinergia y la coherencia entre las medidas de desarrollo rural y los pagos directos, por ejemplo en relación al objetivo de relevo generacional.

  1. Pagos contracíclicos
Los riesgos económicos para las explotaciones agrarias derivados de la volatilidad de precios y rentas se han incrementado en los últimos años, lo que hace necesario explorar instrumentos eficaces para abordarlos. Una opción que ya aplican otros países es la utilización de pagos directos vinculados a la evolución de los precios/rentas en los sectores de producción.  

Estos pagos se podrían acumular en un fondo los buenos años para estar disponibles para utilizarlos en los años de crisis, sin socavar el principio de presupuesto anual. Queremos aclarar que rechazamos las propuestas dirigidas a futuros seguros privados de precios y rentas. No se acepta que se deriven fondos públicos en beneficio de aseguradoras privadas que por la experiencia en otros países no resuelven la precaria rentabilidad de las explotaciones.