martes, 6 de noviembre de 2018

La organización agraria cifra en unas 200.000 toneladas la fruta que debe retirarse del mercado en fresco y el coste total del proyecto ascendería a unos 30 millones

AVA-ASAJA pide al Consell que elabore un plan para destinar a industria y alimentación animal los calibres pequeños de cítricos a fin de revitalizar la campaña

Valencia, 5 de noviembre de 2018. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) solicita a la conselleria de Agricultura la elaboración y puesta en marcha de un plan destinado a favorecer la retirada del mercado en fresco de aquellos calibres de cítricos que, debido a su escaso tamaño, no reúnan las condiciones comerciales más idóneas para su venta al público. De esta manera se conseguiría revitalizar y estabilizar la campaña citrícola en un momento clave para el buen desarrollo futuro de la misma.
Uno de los rasgos que está caracterizando el inicio del actual ejercicio naranjero es, precisamente, la existencia de calibres pequeños que actúan como un elemento perturbador a la hora de conformar precios en el mercado en fresco y, en este sentido, AVA-ASAJA concreta que entre 200.000 y 250.000 toneladas de cítricos menudos deberían retirarse de la circulación para ser enviados bien a la industria de transformación, bien a la alimentación del ganado, ya que de este modo se lograría un relanzamiento de la temporada citrícola al eliminar del canal comercial los frutos de  tamaño menos apto.
"Durante el arranque de esta campaña -reflexiona el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado- se han dado toda una serie de circunstancias, tales como el retraso en la maduración, la ausencia de frío en Europa, la recolección prematura de algunas variedades o la abundancia de calibres pequeños que han generado un clima de atonía comercial que a su vez ha provocado una atmósfera de nerviosismo sumamente perjudicial para los intereses de los agricultores. Sin embargo, ahora entramos en un momento decisivo y por eso sería fundamental disponer de un plan de apoyo a la retirada de esa fruta de tamaño más reducido, canalizándola a través de la industria y la alimentación animal".
De acuerdo con los cálculos efectuados por esta organización agraria, el coste de destinar el referido tonelaje a los fines ya aludidos con el objeto de estimular el mercado en fresco se situaría en unos 30 millones de euros, teniendo en cuenta que el precio a pagar por cada kilo que fuese enviado a industria o a alimentación animal sería de 15 céntimos.
La Unión Europea ya contempla en su normativa mecanismos de retirada para el sector hortofrutícola que incluyen ayudas específicas para las Organizaciones de Productores (OP) -cooperativas y OPs no cooperativas- que opten por llevar a cabo esta opción. Sin embargo, de esos fondos comunitarios para respaldar la retirada no pueden beneficiarse los agricultores que no estén inscritos a OPs y en el caso de la Comunitat Valenciana, al menos el 50% de los mismos se encuentran en esta última situación.
"Y es en este punto -señala Cristóbal Aguado- donde tiene que entrar en juego la Generalitat preparando, y dotando del presupuesto necesario, ese programa para incentivar la retirada de los calibres pequeños. Pensamos que de esas algo más de 200.000 toneladas que deberían acogerse a este plan, alrededor de la mitad pueden encauzarse a través de OPs y cooperativas usando para ellos las subvenciones europeas, pero el resto necesita de la implicación y el soporte del Consell, ya que los efectos de esta iniciativa serían tremendamente favorables para el futuro devenir de la campaña citrícola".

El presidente de la entidad, Cristóbal Aguado, llama a la calma y a defender los precios porque el ejercicio puede ser favorable si se actúa con el rigor necesario

En el siguiente enlace puedes descargar el contenido audiovisual (audio y vídeo) con las declaraciones del presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado: https://we.tl/t-ymGji7xRB0


El presidente de la entidad, Cristóbal Aguado, llama a la calma y a defender los precios porque el ejercicio puede ser favorable si se actúa con el rigor necesario

AVA-ASAJA pide máxima profesionalidad para gestionar la campaña citrícola y alerta contra los mensajes alarmistas que perjudican al agricultor

Valencia, 31 de octubre de 2018. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) asegura que la actual campaña citrícola se encuentra en un momento decisivo que va a marcar su devenir y, por eso mismo, precisa que tanto los operadores comerciales como los productores extremen el rigor y la profesionalidad en sus criterios de gestión a fin de establecer una línea de actuación que redunde en beneficio de todo el sector. Durante el arranque de la presente temporada han confluido una serie de factores -retraso en la maduración de la fruta, calibres pequeños, persistencia del calor en buena parte de Europa, aumento de la cosecha, etc.- que han propiciado la aparición de ciertos discursos alarmistas que están creando un clima de pesimismo entre los agricultores que no se corresponde con las perspectivas reales.
"Efectivamente, -razona el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado- están proliferando mensajes derrotistas muy negativos que dibujan una situación poco menos que catastrófica cuando esto no ha hecho más que empezar. Lo único que están consiguiendo esas voces agoreras es crear un escenario comercial adverso que deja a los productores a los pies de los caballos porque instaura un ambiente de nerviosismo en el campo que sólo sirve para que el agricultor termine regalando la fruta a precios de ganga, cuando en realidad las condiciones objetivas del ejercicio naranjero no son, ni de lejos, tan negativas como algunos pretenden hacer creer. Por tanto, desde esta organización agraria hacemos un llamamiento a los agricultores para que se mantengan firmes y defiendan las cotizaciones ya que la coyuntura del mercado debería experimentar un cambio positivo".
Los elementos que deben marcar ese punto de inflexión que supere la actual atmósfera de atonía se concretan, sobre todo, en el hecho de que el frío -potente y tradicional aliado del consumo de cítricos- ha comenzado a hacer acto de presencia tanto en España como en el resto de Europa; en la entrada a pleno funcionamiento, a partir de la próxima semana, de la industria de transformación a través de la que se canalizan los frutos de menor calibre; y en la paulatina desaparición de los mercados de cítricos del hemisferio sur con el consiguiente aumento de la demanda hacia las producciones españolas, que además presentan este año un nivel de calidad excepcional.
Prácticas indeseables
Ahora bien, AVA-ASAJA señala que todas esas condiciones positivas hay que saber aprovecharlas debidamente con una buena gestión y, en este sentido, denuncia la existencia de malas prácticas comerciales, fundamentalmente, la recolección prematura de determinadas variedades. "Hemos detectado -lamenta Cristóbal Aguado- que estos días ya se están cogiendo en algunos campos clemenvillas y eso es una auténtica barbaridad porque esa fruta aún está verde y la irresponsabilidad de unos pocos perjudica a todo un sector porque las consecuencias de defraudar a los consumidores son nefastas y a menudo irreversibles. Y ese es precisamente uno de los principales problemas que hemos tenido en el arranque de esta campaña".
Al hilo de esta cuestión, Aguado señala que "no se puede enviar cualquier cosa a los mercados. El público es cada vez más exigente y la competencia de otros países y de otras frutas y productos no deja de crecer en un mundo cada vez más global. Este contexto exige apostar por la máxima calidad y profesionalidad y si no tomamos conciencia de esa realidad vamos a pasarlo mal".
Precisamente por ello, AVA-ASAJA exige a las consellerias de Agricultura y Comercio que lleven a cabo una campaña implacable de inspecciones, tanto en campo como en puntos de venta, para asegurar que los cítricos se recolectan y comercializan en su momento idóneo, mientras que al Gobierno español le reclama que impulse ese tipo de inspecciones en el resto de comunidades autónomas y que negocie, en el marco de la Unión Europea, condiciones de reciprocidad laboral, social y de sanidad vegetal con aquellos países terceros con los que se firman acuerdos comerciales preferentes.

Las últimas lluvias rompen las previsiones iniciales y elevan un 10% la producción valenciana de aceite

AVA-ASAJA augura precios razonables para los productores porque, a pesar de la recuperación del aforo español, la cosecha mundial descenderá un 7%

Las últimas lluvias rompen las previsiones iniciales y elevan un 10% la producción valenciana de aceite

Valencia, 2 de noviembre de 2018. Las reiteradas precipitaciones que están descargando durante las últimas semanas sobre el campo valenciano han tenido unas repercusiones extraordinariamente beneficiosas para la producción de aceite de oliva en la campaña que va a desarrollarse a lo largo de los meses de noviembre y diciembre.
La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) sostiene que la evolución experimentada por el clima –pasando de una de las peores sequías de la agricultura valenciana a un otoño lluvioso con una histórica gota fría incluida– ha modificado las previsiones iniciales que apuntaban a un severo descenso de la cosecha hasta tal punto que, después de estas lluvias, se constata un incremento del 10% del aforo respecto a la temporada anterior. Así, los olivicultores de la Comunitat Valenciana recolectarán alrededor de 38.000 toneladas de aceitunas, frente a las 35.000 toneladas que se registraron el año pasado.
La cosecha será abundante y de excelente calidad en la mayoría de las zonas productoras, como el Alto Palancia, Utiel-Requena, la Vall d’Albaida o El Comptat. Entre las excepciones a este buen comportamiento productivo, AVA-ASAJA destaca los términos de Enguera, Buñol y Godelleta, donde la escasa pluviometría durante la primavera causó problemas de cuajado que han resultado irreversibles y que se han traducido en mermas de producción de hasta el 40%.
La organización agraria que preside Cristóbal Aguado augura también unas prometedoras perspectivas comerciales para los productores valencianos después de varias campañas marcadas por una elevada volatilidad de precios. A pesar de la recuperación de los volúmenes de aceite en España –con un aumento del 23% del aforo en comparación con la temporada pasada– se prevé un descenso de hasta el 7% de la producción mundial debido al hundimiento productivo en otros países como Grecia (-33%), Italia (-38%), Túnez (-57%), Turquía (-30%), Portugal (-14%) o Marruecos (-21%). En este contexto, el sector oleícola español espera consolidar su liderazgo en los mercados exteriores y seguir ganando terreno a sus principales competidores. 
Con todo, y teniendo presente una visión más a largo plazo, AVA-ASAJA advierte de las debilidades estructurales que padece la producción de aceite en la Comunitat Valenciana, tales como la escasa implantación del regadío, el envejecimiento de las explotaciones y las dificultades a la hora de mecanizar las labores, lo que encarece los costes de producción y resta competitividad frente a olivares de cultivo más intensivo.
Por eso AVA-ASAJA solicita a la conselleria de Agricultura que destine, a través de la Ley de Estructuras Agrarias, una dotación económica suficiente destinada a facilitar el acceso al riego de apoyo, concentrar las parcelas para ganar tamaño e introducir nuevas variedades que resulten aptas para la mecanización del cultivo.

Variación de cosecha de aceite en los principales países productores:

C. Valenciana
España
Grecia
Italia
+10%
+23%
-33%
-38%

Túnez
Turquía
Portugal
Marruecos
-57%
-30%
-14%
-21%