domingo, 18 de febrero de 2018

COAG-Jaén muestra su preocupación por el peligro de que los algodoneros pierdan las ayudas agroambientales si no pueden sembrar por la sequía

La severa sequía que afecta a la provincia jiennense está provocando que los algodoneros tengan problemas para sembrar cualquier cultivo, por lo que tendrán que dejar la tierra en barbecho

COAG-Jaén solicita que se pueda aplicar el artículo 11 de la Orden a Ayudas Agroambientales para considerar la sequía como una causa de fuerza mayor y que los algodoneros no pierdan sus ayudas por no sembrar

Jaén, 15 de febrero 2018. COAG-Jaén muestra6 su preocupación por el peligro que podría suponer que los algodoneros no siembren esta campaña debido a la falta de agua, lo que llevaría aparejado el incumplimiento de la normativa de 2015 y la pérdida de las ayudas agroambientales de los años 2015 y 2016, además de no percibir la de este año.

Según normativa de 2015, se permite no hacer siembra de algodón siempre y cuando se introduzcan cultivos compatibles con el algodón. Pero con la sequía que asola la provincia, en la zona del Rumblar es muy probable que no haya agua para sembrar algodón esta campaña, pero tampoco se podrá sembrar ningún cultivo. La única solución es que se deje la tierra en barbecho, aunque esta opción no es compatible con la normativa vigente. En este caso, los algodoneros no cumplirían con la Orden actual, un incumplimiento que es considerado como grave. La consecuencia sería no solo que pudieran ser excluidos del régimen y no perciban las ayudas del año actual, sino tengan que devolver ayudas anteriores de 2015 y 2016.

Ante la situación, COAG-Jaén plantea a la Administración que se tenga en cuenta el artículo 11 de la Orden de Ayudas de Agroambientales para que la sequía sea considerada una causa de fuerza mayor y que los algodoneros puedan dejar la tierra en barbecho sin percibir la ayuda correspondiente a este año, pero sin que tengan que reintegrar las percibidas en años anteriores. Es decir, que no cobren la subvención, pero tampoco se les penalice por una causa ajena al algodonero.
AVA-ASAJA reclama a los partidos políticos españoles en el Parlamento Europeo que se impliquen en la defensa del sector para frenar una situación peligrosa e inaceptable

La detección de cítricos sudafricanos con mancha negra se multiplica por seis ante la complicidad de la UE

Valencia, 14 de febrero de 2018. La detección en las fronteras europeas de cítricos sudafricanos contaminados por la peligrosa enfermedad de la mancha negra (Citrus Black Spot CBS) alcanzó durante la última campaña 2017 proporciones verdaderamente escandalosas, al multiplicarse por seis respecto al ejercicio anterior y situarse en un total de 24. A la vista de estos últimos datos oficiales de la Unión Europea (UE), la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) acusa a Bruselas de mantener una posición de clara complicidad con Sudáfrica y de atentar gravemente contra los intereses del conjunto de la citricultura europea.
No en vano, el sector lleva muchos años alertando del grave riesgo que entraña para los cítricos comunitarios la posibilidad de que se introduzca en Europa esta nueva enfermedad de cuarentena y, hasta el momento, la única respuesta de las autoridades comunitarias ha sido una sucesión de maniobras dilatorias para eludir el problema que culminaron, además, con la firma de un acuerdo comercial con Sudáfrica para favorecer la importación de sus cítricos.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, afirma que “la actitud de los exportadores sudafricanos y de la Comisión Europea es simplemente inaceptable y constituye una burla y una tomadura de pelo en toda regla. Bruselas no sólo se muestra complaciente con los desmanes de Sudáfrica en materia de control de plagas, sino que exhibe una intolerable connivencia al firmar un acuerdo que premia a Sudáfrica, país que encabeza el ranking de interceptaciones de mancha negra con dos terceras partes de las 36 registradas, pero al parecer los sudafricanos tienen patente de corso”. En este sentido, hay que recordar que la propia UE ha incumplido sistemáticamente la medida por la cual se comprometió a paralizar las importaciones de Sudáfrica si superaba las cinco detecciones.
La situación ha llegado a tal extremo que el propio COPA-COGECA –la  entidad que engloba a las organizaciones agrarias, entre ellas ASAJA, y las cooperativas europeas– ha tomado cartas en el asunto. El secretario general de dicha asociación, Pekka Pesonen, va a remitir una carta al comisario de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, en la que denunciará el acusado incremento en el número de detecciones de mancha negra y le recordará que, en gran parte, este manifiesto deterioro de la seguridad fitosanitaria está motivado por las discutibles decisiones que adoptó la Comisión en 2016 y mediante las cuales, en lugar de endurecer las condiciones de inspección, optó por permitir que los cítricos importados pudiesen entrar en Europa a través del llamado canal de la industria y sin necesidad de un tratamiento en frío, lo cual volvió más laxos los controles sobre plagas y enfermedades.
El secretario general del COPA-COGECA reclamará en su escrito a la Comisión Europea que anule esas medidas y retome la legislación que estaba vigente con anterioridad a fin de tratar de reconducir una situación que se ha ido de las manos. Cristóbal Aguado señala al respecto que “desde AVA-ASAJA nos sumamos, por supuesto, a la petición formulada por COPA-COGECA y exigimos asimismo un cambio radical de las políticas comunitarias en un asunto tan sensible porque su obligación, como servidores de los intereses de sus administrados, es conseguir que Sudáfrica sea capaz de garantizar la completa seguridad fitosanitaria de sus envíos de cítricos”. 
AVA-ASAJA va a dirigir una serie de escritos a todos los partidos políticos españoles con representación en el Parlamento Europeo pidiéndoles que se impliquen activamente en la defensa de los intereses citrícolas comunitarios seriamente amenazados por el descontrol que impera en las importaciones de agrios procedentes de terceros países.

Intercepciones de mancha negra en cítricos de terceros países:

NO SE REÚNE CON LOS REPRESENTANTES DEL  SECTOR AGRARIO
EL COMISARIO DE AGRICULTURA DESPRECIA AL CAMPO ANDALUZ

COAG Andalucía no entiende que Phil Hogan despache su visita a la región agraria más importante de la UE con un ‘Diálogo ciudadano’ de una hora. Renuncia a conocer de primera mano la realidad del sector agrario andaluz.

Sevilla, 9 de febrero de 2018. COAG Andalucía lamenta el desprecio al campo andaluz que muestra el Comisario de Agricultura, Phil Hogan. Esta organización agraria no entiende que con un  ‘Diálogo Ciudadano’ de una hora de duración, que tendrá lugar el próximo lunes 12 de febrero, el Comisario despache su visita a la región agraria más importante de Europa. Este desprecio es especialmente significativo en el contexto actual de debate sobre el futuro de la alimentación y de la agricultura europea, de cuyo resultado va a depender en gran medida el futuro del campo andaluz. Se está trabajando en una nueva PAC en la que posiblemente haya un cambio de modelo de ayudas, tanto directas como asociadas, y en las políticas de desarrollo rural, afectando de manera central a un sector, el agrario, que es generador de empleo y pilar de la vertebración de nuestro territorio.

Así, en esta visita a Andalucía, el Comisario opta por un acto de autobombo, cosmético, vacío de contenido. No parece la mejor manera de emplear los fondos públicos. Y desde el Gobierno de España no se ha hecho nada por evitar que se consolide este despropósito. Esto no ocurre en ningún país europeo.

Lamentablemente, conductas como ésta son las que distancian y desmotivan a los ciudadanos respecto a las instituciones comunitarias, a las que no ven como representantes y defensores del interés general. La Comisión vuelve a dar muestras de su alejamiento de los ciudadanos y sus carencias democráticas y participativas, al renunciar a conocer la compleja realidad agraria andaluza.

Andalucía, con un 57% de población que vive en el medio rural, es, por número de explotaciones (unas 250.000), por valor de la producción (más de 9.000 millones de euros), por el empleo que genera (casi el 30% del empleo agrario por cuenta propia de España y más del 60% por cuenta ajena), por la diversidad y calidad de sus producciones, por el reconocimiento en los mercados, y por muchas más razones, la principal región agraria de Europa.  

No se entiende que el máximo responsable comunitario visite nuestra región, para un teórico ‘Diálogo ciudadano’ y no se reúna ni con las instituciones públicas con competencias en materia agraria, ni con los legítimos representantes de los agricultores y ganaderos de Andalucía, esto es, las organizaciones profesionales, para conocer de primera mano las características de un sector que ellos mismos califican como “uno de los pilares clave del futuro de Europa”.

Supone un desprecio a los agricultores y ganaderos que cada día trabajan frente a las dificultades, muchas de ellas provocadas por una gestión burocrática desde los despachos que voluntariamente se aísla y se distancia de aquellos por los que debe velar.